Reseña Histórica del PDP


El Partido Demócrata Progresista es un partido político de la Argentina, creado en 1914; goza de especial predicamento en la provincia de Santa Fe, donde en las elecciones legislativas del 2005 obtuvo alrededor del 3,3% de los votos. En 2007, fue uno de los miembros fundadores de la Coalición Cívica.

ORIGEN 

El PDP tiene su origen en la Liga del Sur fundada por Lisandro de la Torre en 1908. Con la sanción de la Ley Sáenz Peña en 1912, la Liga del Sur obtuvo la minoría en Santa Fe, resultando elegido diputado nacional Lisandro de la Torre. En 1914 diversos partidos provinciales confluyeron para formar el PDP. El 14 de diciembre se realizó la reunión constitutiva en el Hotel Savoy de Buenos Aires. Lisandro de la Torre fue elegido presidente del nuevo partido, acompañado por Joaquín V. González, Indalecio Gómez, Carlos Ibarguren, José M. Rosa, Alejandro Carbó, Carlos Rodríguez Larreta, Mariano Demaría y otros.
Enzo Bordabehere.
El Partido Demócrata Progresista intentó conformar un espacio político renovado para la acción del campo liberal, profundamente afectado por la sanción del voto secreto y el fin de la hegemonía del roquismo, integrando diez partidos provinciales; sin embargo, el importante Partido Conservador de Buenos Aires, dirigido por Marcelino Ugarte y el Partido Provincial de Santiago del Estero, de Victorino de la Plaza, no se integraron al PDP.
Impulsaba un programa de reformas que incluía una reforma tributaria que gravara la riqueza y aliviara los impuestos sobre el consumo, la creación de una marina mercante nacional, y una política de proteccionismo industrial. Se instaló con fuerza en el sur de la provincia de Santa Fe y en Rosario. En 1921 el PDP participó en la reforma de la Constitución de la provincia de Santa Fe influyendo en su contenido progresista, en el que se garantiza la estabilidad del empleo público, la jornada máxima, el salario mínimo, la vivienda obrera, el descanso dominical, la promoción de colonias agrarias y el desaliento del latifundio, etc. La constitución fue desconocida por el radicalismo. En la década de los años 1920-1930 comenzaron a actuar en el PDP dirigentes como Mario Antelo, José y Carlos Gervasio Colombres, Vicente Pomponio, Julio Noble y Enzo Bordabehere y Luciano Molinas.

1930 - 1946
Producido el golpe militar de 1930 el PDP rechazó participar en el gobierno militar de José Félix Uriburu. En las elecciones presidenciales de 1932 el Partido Demócrata Progresista y el Partido Socialista concretaron una alianza electoral y presentaron la fórmula Lisandro de la Torre - Nicolás Repetto, que fue derrotada en un sistema que se denominaría de fraude patriótico.
En Santa Fe, sin embargo, la Alianza PDP-PS obtuvo el triunfo, resultando elegido gobernador el demócrata progresista Luciano Molinas. En esa ocasión fueron elegidos diputados nacionales entre otros, Enzo Bordabehere, Vicente Pomponio, Julio Noble, Carlos G. Colombres, Mario Mosset Iturraspe, y Gregorio Parera, y senadores nacionales por Santa Fe Lisandro de la Torre y Francisco Correa.
El trabajo de Lisandro de la Torre en el Senado de la Nación denunciando los negociados ilegales entre empresas inglesas y el gobierno en el sector de la carne, como consecuencia del pacto Roca-Runciman, lo haría conocido con el nombre de fiscal de la Patria y llevaría al asesinato del senador Bordabehere en pleno recinto del Senado el 23 de julio de 1935.

1946-1955
En 1946 el Partido Demócrata Progresista integró la Unión Democrática, que fue derrotada por el peronismo, enviando a Mario Mosset Iturraspé como diputado nacional.

1955-1976
Producida la llamada Revolución Libertadora, que derrocó al gobierno de Juan D. Perón, el PDP integró la Junta Consultiva Nacional, siendo allí representado por Horacio Thedy. En las elecciones de 1957 para reformar la Constitución fueron elegidos convencionales constituyentes Luciano F. Molinas, José N. Antelo, Horacio R. Thedy, Camilo Muniagurria y Luis Sgrosso. En las elecciones presidenciales de 1958 el Partido Demócrata Progresista presentó la candidatura de Luciano F. Molinas - Horacio R. Thedy. En 1963 el Partido Demócrata Progresista impulsó la candidatura del general Pedro Eugenio Aramburu, ex dictador de la Libertadora acompañado por Horacio R. Thedy. Doce diputados demócrata progresistas resultaron se incorporaron al Congreso Nacional.
En 1971 el PDO, representado por Horacio R. Thedy integró "La Hora del Pueblo" junto a los demás partidos políticos, para exigir el llamado a elecciones. En las elecciones presidenciales de 1973 el PDP integró la Alianza Popular Federalista, con la fórmula Francisco Manrique - Rafael Martínez Raymonda, este último demócrata progresista, resultando terceros con 1.800.000 votos. En ese mismo acto, en Santa Fe, la fórmula Alberto Natale - Mario Verdú obtuvo el segundo lugar perdiendo en el ballotage con la fórmula del FREJULI encabezada por Sylvestre Begnis.

1976-1983

DECLARACIÓN DE LA JUNTA EJECUTIVA NACIONAL

Referida a la visita de la COMISIÓN INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS:
La presencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos es consecuencia de los acuerdos constitutivos del sistema interamericano, cuya consolidación se ha logrado con el apoyo permanente de la República Argentina.-
Su visita no puede enorgullecernos, ya que refleja la hondura de la crisis vivida en la Argentina durante la última década.- Empero puede constituir la clausura definitiva- así lo anhelamos- de una prolongada instancia de pérdida de la racionalidad política y de los niveles elementales de civilización.-
“Los demócratas progresistas, consecuentes con nuestro pensamiento y nuestro accionar, hemos levantando en forma constante una enérgica voz de indignación cada vez que se ha usado la violencia como instrumento de acción política- Nos sentimos con derecho a opinar, porque jamás distinguimos- como otros sibilinamente lo han hecho- “entre muertes buenas y muertes malas”. Cuándo diez años atrás comenzó la violencia entre nosotros, al asesinarse al general Aramburu, afirmamos nuestro indignado repudio. Ese ciclo aún no ha tenido cierre definitivo.-
“Es evidente que los niveles de seguridad general son hoy altamente mayores que años atrás cuando, en medio del caos, el crimen era un riesgo potencial para cada argentino. También es cierto que todavía persistente incertidumbres, cuando no certezas, de hechos que lesionan hondamente la dignidad humana.-
“El homicidio, el secuestro, el asalto, la desaparición, el terrorismo en todas sus manifestaciones, jamás serán compatibles con los principios elementales que regulan la convivencia social”.- “La violencia es ilegítima en sí misma”. No hay violencia que justifique violencia. La única válida es la que ejerce el Estado por medio del orden jurídico y que por eso no es violencia sino ejercicio del poder.-
“Los que hoy levantan voces de agravio que no resonaron ayer, tienen tanta responsabilidad como aquellos que ahora muestran indiferencia”. Las incontables víctimas del drama argentino serán testimonio de la crueldad que no se supo contener a tiempo, cuando estaba en gérmenes, y fue alentada desde adentro y desde afuera con eufemismos canallescos, incluso admitiendo su participación activa dentro de agrupaciones políticas. Ni la violencia de arriba justifica la violencia de abajo, como tantos irresponsablemente dijeron, ni la violencia de abajo justifica la violencia de arriba.-
“No es hora de reabrir heridas incurables. Sí es tiempo de cerrar aquellas que puedan suturarse. La presencia del organismo interamericano en nuestro seno será eficiente si nos ayuda a tomar conciencia colectiva de que nunca más podrá ejercerse la violencia en la Argentina. La paz debe sellarse en el respeto silencioso de todos nuestros muertos y en el compromiso absoluto de cerrar definitivamente esta trágica etapa de la vida nacional”.-